Solo una noche. Solo esta

Una sala llena de gente, risas coquetas, miradas, cócteles en bandejas revoleteando; bullicio, humo, y muchas palabras que se escapan de sus conversaciones y navegan por la habitación.

Una mujer. No tendrá más de treinta años, y sin embargo, es la mujer más elegante, estilosa y atractiva de todas las mujeres que hay allí. Su melena rubia recogida en un moño bajo, acompaña al color negro de su vestido abierto por la espalda. Acaba de coger su primera copa de la noche, se moja los labios y mientras se los lame cuidadosamente, lo ve.

Un primer plano de la mirada de aquella mujer cortaría la respiración a cualquiera.

Sorbe otro traguito de su copa y con una tímida sonrisa entrecruza la primera mirada con él. Él, la mira absorto de todo, lejos de ese bullicioso ruido que ahoga la música. Él ya no está para nadie más que no sea ella.

Ella deja la copa en la mesa más cercana que tiene y ,poco a poco, se va acercando, como si dudara de cada paso, pero ella nunca duda. Sabe lo que quiere, y ahora lo que quiere es a él.

Se acerca a él por detrás, que se ha alejado del grupo con quién hablaba mientras intentaba no perderla con la mirada. Ella se coloca detrás suyo y le susurra:

– Baila conmigo.- se ríe y seguidamente aclara- No te pido que te cases conmigo; yo no me quiero casar. Solo quiero bailar al ritmo de jazz. Contigo, ¿Quieres?-

Él apenas respira y no dice nada.

– Está bien.-continúa ella, mientras sonríe picaronamente- ¿No me crees? Si quieres te lo digo más claro. Quiero que bailes conmigo mientras Jane Monheit nos deleita con su Honeysuckle Rose. Así que ahora me postraré delante de ti, te sonreiré y cogeré tu mano. Comenzaré a mover los pies y me acercaré poco a poco a tí; te cogeré fuerte y llevaré el compás. Aprovéchate y acógeme en tus brazos, porque dejaré que bajes tu mano hasta el final de mi espalda y serás el único hombre de toda la sala al que miraré realmente a los ojos. Aprovéchate porque esto tiene fecha de caducidad. Mañana es mañana y aún no existe. Ahora es hoy. Conmigo no valen los planes. Conmigo solo se vale bailar esta canción y, con ella, construir momentos irrepetibles. Aprovéchate porque esta noche te elijo a ti, porque esta noche, contigo y conmigo juntos en la sala, promete ser diferente. Y si eres inteligente, depsués querrás acompañarme a casa. Solo esta noche. Dime, ¿te atreves?

[…]

Un comentario en “Solo una noche. Solo esta

  1. Pingback: Solo una noche. Solo esta | ateneayazul

Deja un comentario